IGLESIAS, POLÍTICA Y ESTADO EN LA PATAGONIA (SIGLOS XX Y XXI)

ANA INÉS BARELLI

Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas

Instituto de Investigaciones en Diversidad Cultural y Procesos de Cambio,

Universidad Nacional de Río Negro,

Bariloche, Río Negro

Argentina

https://orcid.org/0009-0009-6266-0366

 

VIRGINIA DOMINELLA 

Centro de Estudios Regionales “Prof. Félix Weinberg”, Instituto de Humanidades, Departamento de Humanidades, Universidad Nacional del Sur

Bahía Blanca, Buenos Aires

Argentina

https://orcid.org/0009-0000-2224-2834

 

 

PolHis, Revista Bibliográfica Del Programa Interuniversitario De Historia Política,

Año 18, N° 35, pp. 3-13

Enero-Junio de 2025

ISSN 1853-7723

ARK CAICYT

https://id.caicyt.gov.ar/ark:/s18537723/nawx48qwr

Este dossier se nutre de los vínculos construidos y del trabajo compartido desde el año 2017 en la Red de Estudios Sociales Contemporáneos sobre Religiosidades, Creencias y Movilidad en la Patagonia (RESCRYMP). Esta red, surgida con el propósito de promover espacios de diálogo y de formación entre los colegas interesados[1] en el estudio de lo religioso en el territorio patagónico, integra a historiadores, sociólogos y antropólogos del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) y de diferentes universidades argentinas y chilenas (Universidad Austral de Chile, Universidad de Concepción, Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco –UNPSJB–, Universidad Nacional de Río Negro –UNRN–, Universidad Nacional del Comahue –UNComa–, Universidad Nacional del Sur –UNS– y Universidad Tecnológica Metropolitana de Chile).

Desde entonces, lleva adelante distintos proyectos orientados a generar conocimiento sobre lo religioso en el cruce con la sociedad, la política y la cultura desde una escala local/regional y una perspectiva situada. Por un lado, celebró cuatro encuentros organizados bajo la modalidad de workshops, que tuvieron lugar en Bariloche (2017, 2019), de manera virtual en el contexto de la pandemia por covid-19 (2021) y en Bahía Blanca (2023). Estos encuentros congregaron a los integrantes de la red y a especialistas en la historia del catolicismo y las ciencias sociales de la religión de diversos grupos de investigación del país, para reflexionar en torno a distintos temas convocantes, como los desafíos teórico-metodológicos y de la comunicación en el campo de estudios religiosos, o los vínculos de las religiones con la sociedad argentina en las últimas décadas de sostenida convivencia democrática. Por otro lado, como fruto de esos intercambios, la RESCRYMP llevó adelante tres esfuerzos editoriales: un número temático en la revista Sociedad y Religión (2021) –coordinado por María Andrea Nicoletti y Ana Inés Barelli– y los libros Territorios religiosos. Caminos y recorridos de investigación (Teseo, 2022) –compilado por Luciana Lago, Rafael Contreras Mülenbrock y Ana Inés Barelli– y Vínculos religiosos. Miradas regionales y microanalíticas desde los márgenes (en prensa) –compilado por Virginia Dominella y Lucía Bracamonte–. Asimismo, la red ha propuesto grupos de trabajo en las Jornadas Ciencias Sociales y Religión –organizadas por el Programa Sociedad, Cultura y Religión del CEIL-PIETTE, CONICET– y en las Jornadas de Historia de la Patagonia.

Este dossier precisamente surge de los intercambios en las últimas Jornadas de Historia de la Patagonia celebradas en Bahía Blanca en octubre de 2024. Nuestra mesa temática “Religiones, creencias y espiritualidades en Patagonia (siglos XX y XXI)”, sostenida durante las últimas cuatro ediciones de este evento científico, busca ser un espacio para analizar lo religioso en su relación con la sociedad, la política y el Estado, considerando las especificidades de la región patagónica. Asimismo, intenta profundizar la reflexión sobre los aspectos teóricos y metodológicos –desde el contexto conceptual de las investigaciones hasta las técnicas y fuentes utilizadas– para el abordaje de las religiones desde una escala regional, sin perder de vista sus conexiones con otras escalas. En este sentido, piensa la Patagonia como parte de y en relación con realidades más amplias (lo nacional, lo transnacional) y más pequeñas (lo local, lo comunitario, lo barrial, lo institucional, etc.). Por otra parte, apunta a propiciar una mirada interdisciplinaria que permita enriquecer las interpretaciones y dar cuenta de la multidimensionalidad de los procesos abordados.

Así, el dossier reúne un conjunto de trabajos que tematizan el fenómeno religioso desde un enfoque local/regional centrado en un espacio particular del interior del país, alejado de la capital: la Norpatagonia. Para ello, pone el foco en actores, instituciones, experiencias, trayectorias o identidades, tanto del ámbito del catolicismo como del evangelismo (en particular, de la denominación bautista) en distintas coyunturas de los siglos XX y XXI. Al hacerlo, en algunos casos, exploran la relación de la religión con la política e incluso con el Estado, y en otros, ese vínculo emerge de modo menos evidente, aunque de todos modos presente.

En la historia argentina del siglo XX, esa relación constituye un tema fundamental, del que se ha escrito mucho y, a la vez, que sigue generando interrogantes tanto en la historiografía y las ciencias sociales de la religión como en la sociedad contemporánea. Ahora bien, ¿cómo entendemos aquí la religión, la política y los lazos entre ellas? En primer lugar, con Patricia Fogelman (2015) consideramos la religión como una construcción histórica y social conformada por un conjunto articulado de ideas, discursos y prácticas, manifestada en diversas expresiones y que implica relaciones imbricadas, pero jerárquicas de distintos actores sociales en escenarios comunes, tanto como individuales.

En segundo lugar, esta propuesta se sustenta en una noción dinámica y difusa del poder y sus formas de ejercicio que incluye, pero excede la esfera estatal. En tal sentido, recupera lo que Jean-François Sirinelli define como la historia cultural de lo político, que se ocupa del hecho político, abarcador y multiforme, permeable a todas las manifestaciones de la realidad y a las relaciones de poder que en ella se efectivizan (Cernadas y Agesta, 2021). En cuanto al poder, para el análisis de creencias y prácticas religiosas, como afirma Hurtado López (2023), resultan de utilidad los aportes de Michel Foucault. Al centrar la atención en las relaciones recíprocas que funcionan dentro del cuerpo social, en las cuales el poder se vuelve capilar (la familia, la escuela, el hospital, la prisión, etc.), precisa que si bien es cierto que el poder está localizado en manos del gobierno y se ejerce a través del aparato estatal, no puede pensarse como una sustancia, sino como algo que circula. Se trata de una relación de fuerzas entre individuos o grupos en la que uno o más sujetos pueden ejercer autoridad sobre otros, intentando influenciar, guiar o modificar sus comportamientos, ideas o creencias a partir de sus propias acciones.

Asimismo, en línea con los planteos de Lida (2011), este dossier propone una lectura de la historia política de las religiones anclada en la historia social. Sus herramientas nos permiten iluminar, por ejemplo, la historia política del catolicismo. Así, intervenciones públicas de la Iglesia, sus discursos, tradiciones ideológicas o reivindicaciones en el plano estatal pueden ser comprendidas a través del análisis de su relación con los poderes políticos y, a la vez, en sus lazos con la sociedad.

En este contexto conceptual, lo político y la política son tematizados en los artículos aquí reunidos, en la medida en que se ocupan del Estado, sus agentes, sus dependencias y disputas de poder con las agencias eclesiásticas, los modos en los que las iglesias y sus actores construyen territorios donde circula el poder, o los conflictos entre poderes públicos locales e instituciones religiosas atravesadas por valores, ideales y proyectos políticos específicos.

Por otra parte, ¿de qué hablamos cuando hablamos de lo local, de lo regional y de la historia local/regional? Este dossier no supone que la región es una entidad que está allí con independencia de quien se pregunta por ella ni que la historia regional consiste en hacer historia de regiones o parajes por fuera del área metropolitana,[2] asumiendo que lo que la hace diferente es el recorte geográfico sobre el cual se analiza. Por el contrario, esta propuesta se inscribe en una historiografía regional que asume que la región es resultado de una construcción analítica, es decir, es un instrumento teórico y metodológico, por lo cual hacer historia regional es posible gracias a la adopción consciente de una escala de análisis regional (Bohoslavsky, 2018). El concepto se aplica aquí no solo a un espacio físico, sino a una investigación específica. Así, lo local/regional es una categoría flexible que puede hacer referencia a una comunidad, una ciudad, una comarca, etcétera; lo importante es la consciencia de su artificialidad (Serna y Pons, 2003).

Ahora bien, ¿por qué elegimos hacer historia local/regional? Siguiendo a Serna y Pons (2003), por un lado, lo que buscamos no es solo analizar la localidad, sino sobre todo estudiar determinados problemas en la localidad. Pero estudiar en no es sin más confirmar procesos generales. En este sentido, si estudiamos este o aquel objeto en esta o en aquella comunidad no es porque sea una prueba más de lo que ya se conoce, sino porque tiene algo que lo hace irrepetible, que lo hace específico y que pone en cuestión las evidencias defendidas desde la historia general (Serna y Pons, 2003). De esta manera, retomando los aportes de la microhistoria, la historia local/regional que intentamos practicar se basa en la reducción de la escala de observación a manera más de experimento que de ejemplo, en un análisis microscópico y en un uso intensivo del material documental, con el objetivo y la creencia de que ello revelará factores anteriormente no observados y permitirá revestir de nuevos significados fenómenos considerados suficientemente entendidos, permitiendo extraer generalizaciones más amplias (Levi, 2009).

La perspectiva micro viene entonces a resolver la tensión entre las acciones individuales y el contexto global del que dependen, al intentar abordar objetos mayores reduciendo la escala de observación (Serna y Pons, 2003). En ese sentido, si aquí estudiamos trayectorias individuales o instituciones locales, como pueden ser las parroquias o un hospital, las investigadoras se ven obligadas a ponerlas en relación con las coordenadas más generales en las que se insertan.

A partir de estas premisas, el trabajo de María Emilia Sabatella y María Andrea Nicoletti reconstruye, en las primeras décadas del siglo XX, la conformación del Hospital Salesiano de Bariloche, institución que más tarde concluyó en el Hospital Regional público. Para ello, analizan el entramado local en el que se articularon la capilla salesiana “Inmaculada Concepción”, oficinas estatales, asociaciones de beneficencia y los “vecinos caracterizados” para el funcionamiento del hospital. Teniendo en cuenta que, de acuerdo con su carisma centrado en la educación de los y las jóvenes, la acción misionera que los Salesianos y las Hijas de María Auxiliadora desplegaron en el territorio de Río Negro desde 1880 estuvo marcada por la fundación de parroquias y colegios, las autoras se interrogan por las particularidades de esta obra salesiana dedicada a la salud dentro de la congregación. Asimismo, partiendo de la conceptualización de la Iglesia como una agencia que a través de sus prácticas y discursos elabora territorialidades –a su vez inmersas en sistemas de poder–, y considerando las dificultades y limitaciones del Estado para resolver problemáticas sanitarias en los Territorios Nacionales, María Emilia y María Andrea exploran las relaciones específicas que se establecieron entre las agencias eclesiásticas y estatales, y sus disputas de poder en la constitución del Hospital Salesiano, así como su lugar en el proceso de conformación del sistema sanitario territoriano. Este análisis echa mano a la combinación de fuentes provenientes de diversos repositorios –el Archivo Histórico de las Misiones Salesianas, el Archivo Histórico de la provincia de Río Negro, el Archivo Visual Patagónico, el Archivo General de la Nación–, que incluyen constituciones salesianas, cartas, crónicas, publicaciones confesionales, prensa periódica, fotografías, y memorias y documentos oficiales de distintos ministerios.

El artículo de Funkner y Rodríguez se sitúa en la coyuntura crítica de junio de 1955 para abordar las vicisitudes del enfrentamiento entre el peronismo y la Iglesia católica en la provincia Eva Perón –que meses después pasó a llamarse La Pampa–. ¿Cómo fue vivido el conflicto en pequeñas localidades del interior del país donde sus pobladores, por un lado, habían construido una doble identidad, fuertemente católica y peronista a la vez, y por el otro, mantenían vínculos cara a cara, personales, estrechos? ¿Qué características y nivel de virulencia asumieron esas tensiones? ¿Cómo impactó la ruptura entre los poderes públicos y la institución católica en la cotidianeidad de las parroquias y, más allá de estas, de las comunidades donde se insertaban? ¿Qué particularidades adoptó este proceso en estos espacios pampeanos en relación con lo acontecido en grandes centros urbanos como Buenos Aires o Córdoba y en otras ciudades del interior como Tucumán? A partir del análisis de las “Crónicas de la situación vivida por las comunidades” en Santa Rosa, Colonia Barón, Trenel, General Pico y Victorica, de las notas de la jerarquía eclesiástica a cada una de las parroquias a las que se solicitaba informes y de las respectivas respuestas por parte de los curas párrocos, las autoras intentan responder estos interrogantes. De esta manera, esta investigación es un claro ejemplo de la pertinencia de la reducción de la escala de observación para revelar matices y aspectos no advertidos en las interpretaciones construidas desde miradas macro, nacional-estatales o centradas en Buenos Aires, e incluso temporalidades alternativas –teniendo en cuenta que el conflicto se desarrolló en Victorica un mes antes–.

Ana Moyelak, por su parte, centra su mirada en las trayectorias de referentes de la iglesia bautista que, en el período 1985-2020, se trasladaron a distintos lugares de la Patagonia a partir de un entramado de deseos personales, relaciones sociales y fe religiosa que percibieron como un “llamado” divino. Después de contextualizar el desarrollo del evangelismo bautista en Argentina y en Norpatagonia, la autora analiza cinco experiencias de movilidad espiritual hacia Bariloche, Villa La Angostura, Esquel y Clemente Onelli e identifica los modos en que estas impactan y transforman no solo los espacios en los que se insertan, sino también las identidades de los sujetos en cuanto cristianos y misioneros. En este camino, muestra cómo el sur argentino es investido de sentido religioso, constituyéndose como un “territorio simbólico” para el protestantismo bautista, contribuyendo así a la reflexión sobre la forma en que creencias, vocaciones y convicciones espirituales estructuran procesos de movilidad geográfica. De esta manera, al mismo tiempo, el trabajo revela que el protestantismo bautista debe su expansión en Patagonia no solo a estrategias institucionales, sino también a decisiones, vivencias y prácticas subjetivas. Así, la reconstrucción de realidades micro como las trayectorias personales evidencia que estas contribuyen a la orientación de determinadas medidas oficiales o comunitarias. En este sentido, estructura y agencia conviven y son observables en el nivel de análisis general y, a la vez, en otros más reducidos (Cernadas y Agesta, 2021). Para ello, Ana opta por un estilo de investigación cualitativa que prioriza la historia de vida y los métodos biográficos como estrategia metodológica privilegiada para aprehender trayectorias, vivencias, sentidos que los actores atribuyen a sus acciones, vínculos y redes afectivas en las que se insertan. Los testimonios resultantes son triangulados con las actas de asamblea de la Primera Iglesia Bautista de Bariloche, que permiten ubicar las trayectorias en sus contextos institucionales.

Desde una perspectiva de conjunto, los tres artículos que componen el dossier nos ofrecen una mirada situada y original sobre los vínculos entre religiosidad, territorialidad y agencia institucional en la Patagonia. En el recorrido que va desde la reconstrucción del Hospital Salesiano en San Carlos de Bariloche como espacio de articulación entre la Iglesia, el Estado y la comunidad local, hasta las trayectorias de movilidad espiritual de creyentes del evangelismo bautista en el territorio norpatagónico, pasando por las tensiones entre catolicismo y peronismo en la provincia de La Pampa, podemos identificar una agencia religiosa activa, capaz de disputar espacios, construir territorialidades y generar y/o tensionar vínculos sociales. Finalmente, la originalidad de este dossier radica no solo en la diversidad de fuentes utilizadas e interrogantes planteados para problemas de investigación que surcan el espacio patagónico, sino también en el abordaje de una historia regional que trasciende lo local y se afirma como clave interpretativa para interpelar procesos y narrativas nacionales. 

Referencias bibliográficas

Bohoslavsky, E. (2018). La historia regional argentina: identidades, campos y agendas. Quinto Sol, 22 (3), 38-46.

Cernadas, M. y Agesta, M. N. (2020). Juntos pero separados. Estado y organizaciones sociales en la provincia de Buenos Aires (fines del siglo XIX-primera mitad del XX). Polhis, (26), 4-23.

Fogelman, P. (2015). La religión como objeto de análisis: sobre el concepto y tres vías de abordaje histórico. Revista Brasileira de História das Religiões, (21), 7-23.

Hurtado López, P. (2023). Aproximaciones teóricas y conceptuales para abordar devociones religiosas en contextos migratorios. El caso del culto al Señor de los Milagros. En L. Lago, R. Contreras Mühlenbrock y A. I. Barelli (Comps.), Territorios religiosos. Caminos y recorridos de investigación (pp. 201-235). Teseo.

Levi, G. (2009). Sobre microhistoria. En P. Burke (Ed.), Formas de hacer historia (pp. 119-143). Alianza.

Lida, M. (2011). Por una historia social y política del catolicismo en la Argentina del siglo XX. Polhis, (8), 121-128.

Serna, J. y Pons, A. (2003). En su lugar. Una reflexión sobre la historia local y el microanálisis. Contribuciones desde Coatepec, II (4), 35-56.

 



[1] Esta presentación procura evitar cualquier modalidad de lenguaje sexista. No obstante, con el objetivo de facilitar la lectura, se ha optado por pluralizar en masculino.

[2] No obstante, el desarrollo de la historia local/regional ha contribuido a subvertir ciertas jerarquías de la historia tradicional, al introducir lo periférico, lo marginal o lo descentrado en el discurso histórico (Serna y Pons, 2003).