PILAR GÓNZALEZ BERNALDO DE QUIRÓS. ARGENTINA HASTA LA MUERTE POLÍTICAS DE NACIONALIDAD Y PRÁCTICAS DE NACIONALIZACIÓN, SIGLOS XIX Y XX. BUENOS AIRES: FONDO DE CULTURA ECONÓMICA, 2024, 492PP.
PolHis, Revista Bibliográfica Del Programa Interuniversitario De Historia Política,
Año 18, N° 35, pp. 271-273
Enero- Junio de 2025
ISSN 1853-7723
ARK CAICYT
https://id.caicyt.gov.ar/ark:/s18537723/a87ahp2by
La ley sobre ciudadanía italiana 74/2025, que limita el derecho por ius sanguini, y la desilusión que causa entre muchos argentinos muestra los cruces entre los alcances individuales, nacionales e internacionales de las políticas de nacionalidad. Una realidad particularmente vigente en Argentina que nos invita a leer este libro, escrito por Pilar Gónzalez Bernaldo de Quirós, historiadora de la Université Paris-Cité especializada en historia argentina contemporánea y temas de historia conectada como la inmigración y las identidades.
La obra empieza recordando las dimensiones del concepto de nacionalidad. Existe un primer sentido afectivo, entre la nación y el individuo. El segundo es relativo a la pertenencia a un grupo cultural relacionado con la nación, y acaba teniendo implicancias políticas. El tercer sentido es la categoría jurídica, que debe expresar el vínculo entre el estado y sus ciudadanos y es el que interesa la autora, que examina desde diferentes escalas la normativa jurídica y cómo los distintos actores –extranjeros, políticos, juristas– interactúan con ella. Para este estudio, la historiadora usa una muestra aleatoria de dos mil expedientes individuales de naturalizaciones, entre las décadas de 1870 y 1930. Estas fuentes son inéditas; permiten analizar la naturalización desde un punto de vista individual poco estudiado e invitan a hacer estudios más allá de 1930.
Los dos primeros capítulos presentan las leyes y los debates relativos a la naturalización desde el proceso de independencia hasta la ley de ciudadanía de 1869. Al principio la ciudadanía se considera en términos de comunidad natural, que hace hincapié en el apoyo a la libertad asociado con la naturaleza americana. Más tarde, el conflicto entre federales y unitarios muestra la relación de las políticas de nacionalidad con la afirmación de soberanía: la defensa de los extranjeros por sus Estados respectivos puede ser motivo de injerencias. Esta realidad diplomática, junto a la necesidad de poblar Argentina, enfrenta a Buenos Aires y las provincias en la defensa del ius soli o ius sanguini. Después de múltiples controversias políticas y diplomáticas, la ley de ciudadanía de 1869 afirma el principio de domicilio o ius soli. La ley asimila ciudadanía y nacionalidad, lo que hace converger derechos políticos y estatuto jurídico.
Los dos capítulos que siguen se interesan por la doctrina jurídica. Muchos políticos del siglo XIX se forman en las carreras de derecho internacional, lo que les da un lenguaje comun. Se muestra que la doctrina sobre la nacionalidad varía en función del contexto, de las contingencias históricas y de los debates políticos. La normativa también tiene dimensiones internacionales, como lo muestran las redes globales de juristas o las organizaciones internacionales, que codifican el derecho. La mayoría son europeos que defienden un derecho universal que sirve sus intereses. Los escasos americanos en esos círculos intentan defender su soberanía mediante una visión más centrada en el ius soli, que corresponde más a su realidad.
La historiadora prosigue analizando trayectorias individuales de naturalización y desnaturalización. Muestra cómo se ha formado una opinión pública que considera que los extranjeros no hacen esfuerzos para naturalizarse, opinión que la autora desmiente, pese a que las naturalizaciones no sean tan importantes como en Estados Unidos. Ello se debe a que la ley permite a los extranjeros vivir en el país sin tener mayor necesidad de naturalizarse. De hecho, ser extranjero puede ser útil, y en efecto algunos argentinos intentan a veces hacerse pasar por extranjeros. Eso muestra que la nacionalidad puede ser vista individualmente desde un prisma meramente estratégico.
En los dos últimos capítulos la autora muestra las consideraciones ideológicas que pueden afectar la aplicación de las leyes. Por ejemplo, el hecho de que las políticas de nacionalidad varían durante los períodos de alternancias entre gobiernos civiles y militares. En 1931, las ideologías nacionalistas del Estado abren una brecha en la concepción argentina de la nacionalidad al hacer posible la desnaturalización, con criterios ideológicos. También se dificulta la naturalización para darle un carácter esencialista a la nacionalidad. Esas consideraciones políticas e ideológicas se evidencian también en la tragedia de los argentinos que quedaron atrapados en la guerra civil española, que por una ambigüedad legal son considerados nacionales por Argentina y España, y a los que Argentina no apoya al considerarlos ciudadanos indeseables.
La cuestión de género aflora en todos los capítulos, mostrando la desigualdad que padecieron las mujeres en las políticas de nacionalidad por el uso del ambiguo neutro masculino y un derecho hecho por y para los hombres.
Los capítulos se pueden leer solos, pero presentan temas transversales que reaparecen desde la óptica de diferentes campos o de escalas. Estos cruces de nociones con diferentes perspectivas de actores y contextos dan una gran riqueza a la obra, pues permite descubrir las estrategias de los Estados como la de los individuos en torno a este objeto jurídico que es la nacionalidad. La historicidad de esas políticas queda así demostrada, y nos interroga sobre los aspectos identitarios de las mismas: las leyes y las naturalizaciones resultan ser a menudo contingentes e impulsadas por intereses políticos o individuales. Pese a esas contingencias, la autora hace hincapié en la durabilidad de ley de ciudadanía de 1869, modificada por los regímenes militares pero reestablecida en 1983, que es favorable a los extranjeros, y la importancia que tiene el hecho de que la justicia y no el ejecutivo otorgue la nacionalidad. Un libro de calidad, con gráficos explicativos, que resuena con la actualidad en la que las nacionalidades y la inmigración cristalizan muchas tensiones.